domingo, 23 de octubre de 2011

Reflexiones mientras corro..

Quiénes son los/as que corren ?; quienes son los/as runners que cada domingo se suman a las huestes de corredores urbanos.., a mi alrededor hay muchos/as de 40 o un poco por encima. Ahí están me parece en pleno point of no return, debatiéndose entre la pasión y la razón que los tiene a mal traer.

Es un desfile constante de marcas de última generación..; la última adquisición son las medias de compresión (comprim run). A casi todos/as no les ha deparado mejoras ostensibles, pero ellos/as los tienen. Casi como los Black Berrys.. infrautilizados pero de libre disponibilidad.
Personas increíblemente cómodas en sus casas y terriblemente incómodas en la vida. Gente que no desea romper con sus rutinas; con todos los "cajones" mentales acomodados y que difícilmente encuentren algo de espacio para guardar cualquier cosa que los desordene. Con desafíos muy personales, sin sueños colectivos.
Personas de 40 y con cierta negación a buscar otros caminos. Tachadores incansables de listas de lo que les queda por hacer y de lo que se les pasó. Con escaza práctica en psicoanálisis.

Ellos seguramente han reemplazado el psicoanálisis por “confesiones de café” con algún otro cuarentón; ellas con salidas de amigas para contarse las aventuras.
Ellas; se tiran un shopping encima ante sus crisis emocionales, sobre todo The North Face y ellos malgastan su dinero en mountain bike y ridículas cañas para pesca con mosca.
Han descubierto el maravilloso mundo del sexo virtual, facebook, twitter y myspace. Tengo la impresión que sólo lo usan para conocer gente; ya no sueñan en tocar como Jimmy Hendrix o escribir como Bob Dylan y nadie disimula que sos ídolos son Marcelo Tinelli y Paula Chavez.
Miro a mi alrededor y veo tipos con raros peinados, muy babasónicos. Seguramente (y perdón por el prejuicio) cuando dejen la ropa deportiva se verán desorientados (con la moda), y no será extraño verlos de un día para el otro con pantalones chupines, ojotas y remera estilo Ricky Martin aunque a muchos se les haya olvidado los abdominales.
Parece como si la inmensa mayoría de los que me rodean hubiera salido a quemar las naves y a vivir sus "verdaderos sueños de transformación". Me asombra cada vez más ver como "médicos" lideran vergonzosas bandas de covers, licenciadas en Ciencias de la Educación soñando con ser vedettes que hacen un "acto" a finde año para mostarle a los familiares lo bien que bajan las escaleras con conchero y plumas; sociólogas que bailan caño, abogados que se inscriben en talleres de iniciación a la pintura al óleo y escribanos ultra serios pretenden ser djs. Su eterna dicotomía filosófica transcurre entre un BMW o un Audi o entre poner una casa de tortas para tomar el té o el curso de astrología maya.

jueves, 20 de octubre de 2011

Depresión post maratón

Habitualmente me sucede que cuando bajo de una montaña, habiendo hecho cumbre, siento una suerte de vacio que no se llena con nada. Algunas veces lo emparento con una suerte de depresión por el objetivo alcanzado. En los post maratones nunca he sentido esto.., si bien he entrenado muy duro, por meses (en este último maratón fueron solamente dos meses y medio, pero lleno de restricciones en relación a la comida, al alcohol a las salidas, etc), he logrado el objetivo… ¿y ahora?.

Ahora de a poco estoy volviendo a correr; en la última semana he rodado ya unos cuantos kilómetros sin molestias y con placer. Ya he comenzado a pensar nuevamente si, montaña, ciclismo, medio tria, completo o más carreras; todavía no lo tengo muy claro.

Lo que si.., no me siento “triste” o deprimido; aunque las motivaciones (físicas) han desaparecido por el momento. Si tengo dando vueltas por mi cabeza que la nueva meta, no tiene que ser de inmediato,

Sea lo que sea, voy a ir de a poco.. estoy listo para relajarme un poco y luego comenzar a entrenar para las próximas metas. Independientemente de mis objetivos, sé muy bien que una transición adecuada asegura la recuperación tanto física como mental y sé que ésta combinación es un requisito previo para poder reanudar el cualquier entrenamiento.

He visto el daño que los atletas comunes pueden hacer con sus estaciones, y su salud a largo plazo-a través de la recuperación indebida (sobre todo con el peso).

Los americanos llaman al primer paso The Big Picture; esto es una perspectiva muy relajada en las primeras semanas después de la carrera de larga distancia. Uno es una persona real que vive y trabaja en el mundo real y acaba de terminar un acontecimiento importante.

Como una persona real haciendo las cosas del mundo real, uno se debe a si mismo dar un gran paso atrás de la próxima meta y volver a conectarse con las otras cosas que son importantes en la vida: la familia, las aficiones, incluso el trabajo!

martes, 11 de octubre de 2011

Ahora, a recuperarme.. (comiendo!!)

Para mí (después de un maratón); el descanso es tan importante como la alimentación sana (y rica). Pasé los últimos dos meses y medio cuidándome, tratando de bajar de peso sin perder fuerza y ahora en las próximas dos o tres semanas tengo que lograr que el cuerpo regenere tejidos y recargue la energía gastada en los 42.195.

Ayer salí al menos dos veces a caminar; subí y bajé los dos pisos (altos) que hay para entrar y salir de mi casa y aproveché para comer y descansar.

En mi experiencia recuperarse de un maratón cuesta a veces más de una semana. Algunos dicen que la recuperación no es completa hasta después de un mes de la carrera.

El cansancio físico, el dolor muscular o la deshidratación provoca a veces que uno se olvide de alimentarse para recuperarnos de semejante esfuerzo.

Si bien durante los meses previos a la maratón es necesario llevar una dieta rica en carbohidratos, proteínas y grasas sanas, también es importante seguir el cuidado una vez cumplido el objetivo 42.195 con un buen descanso, hidratación y, por supuesto, seguir comiendo bien para recuperarnos sin problemas.

hay que cuidarse las vías respiratorias; aumentar los linfocitos T, anticuerpos e inmunoglobulinas. Recuperar sales minerales perdidas (sodio y el potasio) fáciles de encontrar en las frutas y jugos naturales.

Recuperar magnesio, para evitar calambres, manteniendo en mi caso la ingesta de clorofila (habitualmente como muchos verdes porque me gustan) y obviamente mi mejor amigo el hierro; el que me ayuda a subir montañas y se encarga de transportar oxígeno por mi sangre hasta los tejidos , (evitando que me sienta cansado)

Por último el zinc, mineral que se pierde en el sudor y en la orina después de una situación de estrés físico o psicológico como un maratón. Así que esta semana estaré de parabienes comiendo mariscos, cereales integrales, germen de trigo, levadura de cerveza y/o carnes rojas.

Mi quinto maratón

El Maratón en general es un proyecto difícil. Su distancia es muy demandante, de hecho escuché muchas veces a un médico compañero de carreras decir que es cuestionable correrlo desde el punto de vista "saludable". Prepararse para un Maratón no son pocas semanas o meses de trabajo, debería ser al menos un año de proyecto total, según Marcelo Linck, el personal trainer y amigo; pero este año no tuve las fuerzas necesarias para comenzar un año antes y contra todos los pronósticos comencé a mediados de julio; con lo que preparé el maratón apenas 2 meses y medio antes.

El Maratón representa varios desafíos, entre ellos: Una gran parte de nuestros músculos son utilizados cuando corremos y necesitan mucho oxígeno, lo cual es quizá el factor más crítico y limitante; los 42.195km. normalmente se corren en una superficie dura, por lo que el golpeteo en las piernas y músculos es muy fuerte.

El tiempo para correr esta distancia es de un poco más de 2hrs. para los corredores elite y de un par de horas más para nosotros, corredores amateurs.

Entrené a conciencia estos dos meses y medio pensando en 3 horas 45' o 4 horas; aunque sabía que sería todo un logro poder llegar antes de las 4 horas.

Me levanté a las 04:15 para ver el partido por los cuartos de final del Mundial de Rugby entre Argentina y Nueva Zelanda; desayuné lo de siempre y a las 06:15 estaba buscando un taxi que me acercara hasta el barrio de Nuñez para largar puntualmente a las 07:30.

Apenas unos mintutos de entrada en calor, mucha más alongación que calentamiento y largamos.

Hasta el kilómetro 10 mi ritmo fue bueno; ahí me encontré con mi sobrino Marcos que me llenó de alegría. Me sacó unas fotos y quedamos en vernos en el 28k.



A los 20k llegué en 1:55; la peor parte se acercaba -el barrio de la bosta- sin gente que aliente; olor pestilente y calles con pozos.
En Puerto Madero (km. 28) tuve el segundo encuentro con Marcos, otras fotos y a seguir..





El km. 30 me encontró con 3 horas de actividad; todo presagiaba un buen maratón (llegué a pensar que el tiempo de 3:45' no era una locura) sin embargo al llegar al 35 sentí mucho cansancio y la subida del puente terminó por sepultar mis esperanzas de hacer un buen tiempo.





Padecí el 37; el 38 y el 39; pero ya con la meta a la vista pude sostener el ritmo (bajo) que traía; no parar y terminar los 42.195 dignamente en 4 horas 31'.

Para mi sorpresa; es la primera vez que termino sin dolores y sin contracturas.


jueves, 6 de octubre de 2011

Jueves 6 de octubre, a 3 días..

Hoy salí a rodar un poco; 9k a buen ritmo.
Estoy pensando qué comer de especial sin salirme de lo debido, ya que llevo dos meses y medio bajando de peso y entrenando duramente para estos 42.195.

Siempre te dicen; el maratón junto con el ciclismo o el triatlón, es uno de las actividades de larga duración que mayor desgaste físico supone. De manera que es muy importante acompañar el entrenamiento previo con una dieta que proporcione la energía necesaria y garantice el buen rendimiento.

Debemos pensar en una dieta rica en hidratos de carbono y baja en grasas y proteínas. Esto con el fin de llenar las reservas de carbohidratos (hígado y músculos). Después de una comida rica en hidratos de carbono las reservas de los músculos se habrán abastecido completamente de glucosa.

Pensar en volver a comer pan, y seguir con legumbres, pastas, arroces, cereales y papa además de fruta y hortalizas.

He seguido disciplinadamente el entrenamiento y he hecho dieta; bajé de peso y entrené duramente. Espero poder rendir..

El sábado tendré que cenar temprano y acostarme. Me levantaré a las 04:00 de la madrugada a ver el partido del Mundial de Rugby de Los Pumas con los All Blacks; luego ya no podré volver a la cama, así que dare alguna ventaja..

Comer entre 500 a 1.000 calorías de carbohidratos de asimilación lenta, yogur con muesli, frutos secos y frutas; para tener una correcta digestión y vaciado gástrico de modo que el nivel de glucosa en sangre, así como la reserva de glucógeno sean adecuados, llegar liviano a la carrera.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Últimos días!!

Como en las otras experiencias anteriores, he llegado a la semana donde se concluye, prácticamente, el plan de entrenamiento sui-generis de nueve semanas (un parto), para correr el Maratón de Buenos Aires en menos de 4 horas. (sé que estoy siendo muy optimista..)

Esta carrera se la dedicaré a mis afectos (Aleja, padre, hermanos, sobrinos y sobrinas y amigos y amigas que han estado cerca en este tiempo).

Estoy con mucho optimismo, porque el trabajo se hizo, me siento muy bien, además confío, suerte mediante, en que lograré conseguir el tiempo estimado.

Estos 42k serán una gran prueba para mi, espero que me ayuden a recobrar la confianza en los entrenamientos; controlar la adrenalina, la euforia, el entusiasmo y la emoción, que se genera en la salida de cada 42k, de manera de poder controlar el ritmo en los primeros 10 km. Recobrar mis condiciones físicas anteriores, cosa que me genera muchas dudas e incertidumbre.

Del resto, sólo queda confiar en que salgan los resultados esperados, pero sin obsesionarme, ya que, he aprendido a través de los años que los 42k son impredecibles. Y que muchas veces lo tiempos obtenidos no van de la mano con lo que uno espera. Para mi llegar a la meta ya es importante y si bajo las 4 horas (una vez más) será grandioso.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Último entrenamiento "serio"

Se termina el mes; la semana y el plan de entrenamiento que me diseñé (yo solo y en base a la experiencia acumulada y los años con personal trainer) para estos particulares 42.125 que correré este 2011. Miro para atrás y tengo 9 semanas de entremaniento serio y algunos días más de acumulación de kilómetros para hacer base.

Quedé conforme con el tiempo. Corrí 19k en 1h. 30', intercalando 3' a ritma de carrera y 2' a ritmo tranquilo. Terminé sin dolores, sin sensaciones de carga en mis gemelos, de buen humor y hasta con ganas de tirar 10k más.

En el último mes acumulé 213k y en total en los dos meses y medio casi 500k; por lo que supongo que las Saucony ProGrid Jazz 14 me tienen que aguantar este maratón. (nunca uso zapatillas por mas de 700k para carreras)

Las últimas dos semanas del maratón son para mí una cosa muy importante; pero no por lo que entreno, sino por lo que voy dejando de entrenar.

En la última semana (la próxima) trataré de rodar 60' el lunes, 8k el miércoles y un rodaje muy suave de media hora el viernes. El resto, descanso completo para la carrera del domingo 9 de octubre.

Ahora me queda una semana para pensar la carrera, decidir algún plan y descargar algunos kilómetros en un par de días. Hay que ser prudente con el ritmo de la carrera. El maratón es una prueba que castiga a los suicidas. Un error habitual es no tener muy claro de salida a qué ritmo uno va a correr y dejarse llevar por la emoción y la adrenalina de tener al lado a 8.000 personas. Para mí lo ideal es tratar de correr la segunda parte más rápido que la primera.

Ya todos saben (particularmente los que han corrido un maratón alguna vez) que disputar una carrera como el Maratón (42,195 km.) supone un esfuerzo extraordinario para el cuerpo, y, por tanto, requiere de un entrenamiento serio, exhaustivo y centrado específicamente para esta carrera y lograr así el fin último: Llegar a la meta (las personas comunes, como yo) no pretendemos otra cosa que esto; no es mi objetivo ni hacer marcas (aunque reconozco que a veces lo pienso) ni quedar por delante de nadie, solamente me preocupa poder cruzar la línea de meta y, si puede ser, en buenas condiciones.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Día de descanso físico pero no mental

Me siento ansioso y no debería.. o si!, por qué no?!, aunque no sea debuntante no debo olvidarme que soy una persona común. Tengo que tener claro que para mi este año (más que ningún otro) se trata de llegar.
Hoy no salí.., pero mi cabeza no deja de pensar en los 42.195. Mi cabeza no deja de pensar en si podré esta vez o no.., no dejo de pensar´en el kilómetro a kilómetro. El obelisco de Buenos Aires será el km. 11; el punto más lejano, el que mi cabeza identifica con que a partir de ahí "regreso" es el 17/18k justo en el barrio de la bosta; mi "casa"; el lugar que conozco muy bien porque ahí entreno (Puerto Madero/Reserva Costanera Sur) es del 20k. al 28k. la zona de aburrimiento va desde el 30k. al 34k (ahí mismo donde la última vez sentí que mi rodilla izquierda me dolía es el Puerto de Buenos Aires y seguramente el "puto" muro) y lo que queda es la gloria..

Ya tengo mi rutina.., no desayunaré nada del otro mundo, lo mismo de siempre. Mi café, mi polen, mis almendras, algún pancito, poco líquido. El líquido lo habré bebido los días anteriores.

Tengo que pensar en mi remera; todavía no la elegí. Si mis Saucony Jazz; si mis medias Adidas (nunca Nike porque esa marca es mala palabra para mi)

Empezaré tranquilo; ya sé que se trata de una carrera larga. Si pienso elongar un poco. Si necesito concientizarme en lograr mantener un ritmo parejo y ver si me es posible acelerar "progresivamente" en la segunda mitad.

Sólo una vez corrí con cuenta de tiempos/kilómetros y no me sirvió; siempre estuve por debajo; tampoco me sirve elegir un "pacers" de tiempo.. tengo que hacer mi carrera; a mi ritmo. Sólo llevaré reloj; mi Suunto Vector de montaña, para ver el tiempo.

Como muchos dicen: El hecho de estar ahí ya es un mérito. Hay que recordar que uno está haciendo algo maravilloso. “El cansancio es temporal, el orgullo es eterno" como dijera alguién: Las medallas se ganan en los entrenamientos. En las competencias se retiran.

martes, 27 de septiembre de 2011

Comienza la descarga

de a poco tengo que ir descargando los kilómetros (re) corridos. En lo que va del mes (27 días) sumo 200k.; nada mal; aunque lejos de los 240k que supe hacer otros años. Creo que también son sin calidad, son sólo kilómetros.. es como si hubiera llevado a la práctica los escritos de Haruki Murakami en "De qué hablo cuando hablo de correr"

Escribir es una "labor física". Dice: "pensamos con todo el cuerpo". El sudor se hace aquí espiritual, psicológico, culto, temperatura estilística.
y sigue.. "Soy de los que, a base de someter el propio cuerpo a cargas reales y de hacer que los músculos se quejen (a veces con grandes alaridos), van consiguiendo que suba de veras la aguja del indicador de su grado de comprensión hasta que, por fin, quedan satisfechos". Siempre describiendo esa perfecta sensación de "nuestra" soledad; de la soledad del corredor de fondo. Aplicando esa figura de la personificación en los propios órganos, que dan alaridos: "¿Cuándo fue la última vez que pensé en serio en mis rodillas? Al hacerme esta pregunta, sentí que les debía una disculpa a ambas."

Hoy apenas rodé 10k, pero me sentí pleno, de buen humor.
A veces el cuerpo queda hecho artificio, aparato, y se identifica con uno sin fisuras, ni desdoblamiento. A veces, somos nuestro cuerpo (rodillas incluidas). "No soy humano. Soy una pura máquina. Y, como tal, no tengo que sentir nada. Simplemente, avanzo". Así fue como este mes he corrido 200k..

Murakami es audaz, habla de su físico como si hablase del mundo entero: "Me concentro en mi cuerpo para que no se me escape ningún sonido, ninguna escena, y para no perder el rumbo". Spinoza decía: "aún no sabemos lo que puede un cuerpo".

El dualismo también se rompe cuando el ejercicio físico termina siendo ejercicio espiritual: No será este mi caso pero Murakami dice: "De todas las cosas que comportó para mí la experiencia de la ultramaratón, la más significativa no fue de carácter físico, sino espiritual". "El acto de correr se hallaba ya en un ámbito que rozaba casi lo metafísico. Primero estaba el acto de correr y luego, como algo inherente a él, mi existencia. Corro, luego existo".

lunes, 26 de septiembre de 2011

Fraccionar el entrenamiento (dedicado a mi entrenador de maratón)

Acabo de hablar con mi entrenador (al que por cuestiones de tiempo no veo hace unos años; pero que regularmente sabe de mi porque lo consulto todo el tiempo)

Marce: Estoy corriendo "normalmente" 20k. casi por día.. (o mínimo 3/4 veces a la semana), la semana pasada (domingo) tiré 27/30k, y tuve un fuerte dolor en los dos gemelos y corté en 25k; estuve esta semana parado (para cuidarme un poco) y hoy tiré 20k otra vez normalmente, pero el gemelo izquierdo lo tengo un poco cargadito.., creo que elongo bien.., pero (y acá viene la pregunta) puedo hacer algo más?; pensaba estar la última semana sin hacer nada, pero tengo miedo que como no haya probado 30/32k sin problemas, esto me pase factura.. qué decís

Empeza a aflojar con los fondos largos y fraciona el entrenamiento. llamame que lo armamos..


El ya lo sabe.., todos lo sabemos. Tener un "orientador/entrenador" es fundamental. Es importante que tengamos claro que cualquier cosa no nos sirve a la hora de entrenar, y es vital saber detectar un buen entrenador personal. Yo creo que lo hice en 2004; desde ese momento pude correr 5 maratones y le tengo plena confianza.

Antes que nada Marcelo es un tipo que no solamente me "dice" qué ejercicios tengo que hacer, sino que es algo más, se trata (todo el tiempo) de un apoyo a la hora de progresar en los entrenamientos y mejorar la salud y cuerpo con sencillos pasos que no suponen nunca riesgo para la salud.

Nunca impone la rutina, sabe ser un apoyo para mejorar en el día a día.

El corredor de fondo es un deportista que enfrenta en muchas oportunidades una de las competencias más dura de los tiempos actuales; me refiero a los 42,125.

Por eso -para mí- es "vital" consultarlo; porque sin lugar a dudas en el transcurso del maratón se ponen de manifiesto todas las virtudes y cualidades obtenidas y desarrolladas durante el silencioso proceso de entrenamiento; aunque muchos puedan pensar que entrenar para una competencia de fondo es simplemente salir a correr y disfrutar del paisaje.

Una semana sin actividad

Llevo siete días sin salir a rodar, así que trato de manejar la ansiedad, me calzo las zapatillas y salgo. me propongo tirar 10/12k.., buena marcha a pesar de ser las 15:00 y el sol de esta primavera porteña ya se siente (18°).

Llego al 9k y me siento bien; el tiempo es el mismo de las últimas semana así que decido seguir; tirar unos kilómetros más. Por ahora no hay señales en los gemelos.

Completo el recorrido de 20k en 1h. 40', me siento bien; apenas un recordatorio en el gemelo izquierdo. Elongaré más de lo habitual.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

4° día de descanso "forzado"

Llevo cuatro día sin correr. Necesito encontrar equilibrio personal y familiar durante estas tres semanas que faltan. Si sigo pensando en que me duele (dato objetivo) y en que no sé si podré correr el 9, se va a convertir en una insana obsesión..; la ansiedad por la proximidad de la fecha, y el poco entrenamiento de esta semana, están siendo un factor difícil de controlar para mí; sin embargo, sé que el control de estas ansiedades y expectativas es la llave oculta del éxito. Necesito estar atento a la respuesta corporal del domingo..y supongo que este hecho también repercutirá directamente en mi preparación mental.

La ansiedad es producto del estrés precompetitivo. En realidad, la ansiedad y el estrés se relacionan en cierto modo, o sea que la diferencia entre estrés y ansiedad reside en el hecho de que el estrés se puede tratar, en cambio la ansiedad no se puede tratar.

Si el estrés puede ser una situación aleccionadora, o un motivador, tengo claro que me inspirará; pero si el estrés desemboca en sentimiento de frustración que escapa a mi control, crea ansiedad, y, con el tiempo, redundará en fatiga y perjuicios.

Dicen que afortunadamente, la mayoría de las ansiedades en los atletas se pueden neutralizar con la actividad física, la cual elimina o minimiza dichas características. Esto explica por qué los atletas, en su mayoría, no sufren de úlceras o de problemas cardíacos y circulatorios con la misma frecuencia que la población en general con parecidos problemas de ansiedad, pero que no suele disponer de medios de relajamiento físico, pero a mi todavía me duele la cara interna del gemelo izquierdo..

Un día más de descanso y pruebo!

lunes, 19 de septiembre de 2011

Domingo 18 - Primera prueba..

Son las 10:00 de la mañana; hay apenas 11° en Buenos Aires y el sol se demora en salir. Hoy tengo pensado rodar 25k/27k.

Salgo, me siento bien, se siente el aire frío y el recorrido previsto es amigable. Recorro tranquilo los primeros 15k; aprovecho a tomar un extra de HC (gel) pero hoy no siento lo mismo que otras veces -un extra de energía que entra a mi torrente sanguíneo- será que me estoy acostumbrando?, me estaré volviendo "resistente" a esta ayuda..

Entre el 18k y el 20k comienzo a sentir como mi gemelo izquierdo se sobrecarga; pienso muchas veces en parar (aunque la sobrecarga no me impide seguir corriendo, pienso en el 9 de octubre); pienso en seguir aún con el dolor para "entrenar" una situación posible de la carrera; pero no, sigo así hasta el 25k.; miró el reloj y tengo 2h 20' de actividad.

La verdad es que no quedo conforme con el rendimiento; regreso a casa de mal humor, con el dolor que se incrementa. Ahora identifico que no se trata puntualmente del gemelo, sino de la cara interna del gemelo izquierdo, a media altura. Siento una pequeña molestia cuando camino pero cuando empiezo a correr y realizo los apoyos el dolor es bastante fuerte.

Creo que el parate del último año y el "excesivo" compromiso de los últimos dos meses, me está pasando factura. Descansaré algunos días y veré.

No quiero ni pensar en no poder correr el próximo maratón

jueves, 15 de septiembre de 2011

Jueves 9 08:00 (siento los km. acumulados)

Después de dar unas cuantas vueltas por la cama y habiéndome despertado a las 06:30 decido levantarme. Hora 07:00, preparo mi desayuno. Algunas almendras; una taza de café, unas cucharadas de polen y una banana.
Enciendo la notebook, leo los diarios de mi país y de buena parte del mundo, contesto algunos mensajes electrónicos y mi cabeza comienza a funcionar. Ir o no ir; 11°, luz primaveral pero no calor.

Pienso en algunos datos objetivos que sólo me están aportando los entrenamientos, pero no las competiciones previas porque he empezado muy tarde a emtrenar y he decidido sólo entrenar para el maratón del 9 de octubre.

Pienso en la temperatura. A las 07:30 (hora de largada) habrá más o menos la misma temperatura con la cual entrené los últimos dos meses.
Pienso en que esta vez no correré con el equipo habitual; lo haré solo.
Pienso en la capacidad individual de sufrimiento y creo que la he entrenado.
Pienso en que el cuerpo se niega a moverse y siento que cualquier otra cosa que pudiera estar haciendo en ese momento sería más agradable que salir a entrenar. Pese a todo, salgo.

Hasta los primeros 15' (tal vez el 1°km. o 1,5k, contando cruce de calles, esperas en semáforos, etc) el cuerpo protesta; hoy no quiere salir. A partir de los subsiguientes minutos, ya se deja llevar porque sabe que hoy hay que correr al menos 19/20k.

Entrenar bajo circunstancias agradables parece más fácil pero requiere un cierto grado de motivación. Llevar a cabo un plan de entrenamiento en el que se incluyan situaciones menos agradables requiere, sin embargo, un grado de motivación muy alto, que puede establecer la diferencia entre quienes salen a entrenar de vez en cuando y quienes siguen un plan de entrenamiento más "serio". Yo creo estar de este lado. En 15 días que van dedel mes de septiembre, he rodado ya 140k.

La motivación no cae y esto me ha llevado a pensar que es una de las variables esenciales de cara a mi rendimiento. Que espero pueda manifestarlo en el maratón; ya que, aunque son las piernas del corredor las que se mueven, es la voluntad de mi cerebro la que las empuja a moverse.

Si la motivación incrementa mi compromiso, debo pensar que cuanto más motivado esté mejor disposición tendré para entrenar, cuidar mi alimentación y realizar todo lo que supongo requiere mi preparación. Tengo -sin embargo- que controlar, no obstante, que no ocurra que una motivación excesiva me empuje a sobrepasar los límites de lo que es adecuado; necesito "explotar" el 9.

Ruedo 19/20k en 1 h. 40'. Mañana descansaré y el sábado o domingo trataré de "tirar" 27k. de manera de comenzar a sentir ya la sensación de estar 3 horas en actividad.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Martes 13 07:30 (necesito -y deseo- cultivar un huerto)

Hoy tiré un fondo de 22k y todo salió bastante bien, por lo menos hasta el 20; el resto fue ya sin ganas.. Se me abre un mar de dudas; llegaré esta semana a correr dos o tres veces más 22k?; la próxima tenía planes de correr (al menos) un día 27/30k y con eso ir cerrando para poder descansar 10 días y después empezar la descarga. Creo que el esfuerzo grande estará hecho con suficiente anticipación a la fecha del maratón.

He escuchado que algunos no tiran mas de 26k en fondos a tres semanas del maratón; argumentan que liquidás las reservas muy sobre la fecha; pero claro a esa altura la base ya debería estar. Hoy estoy en 22 con esfuerzo y apenas tiraré los 30 en una semana. Luego, solamente un fondito de 22K a buen ritmo; algunos con cambio de ritmo y no mas.

Las zapatillas que tengo son Saucony Jazz (en mis anteriores maratones tuve Asics Gel Cumulus y Nike Pegasus)nada del otro mundo; pero que aguantan 600 a 700k y en tres meses ya le hice casi 400k y como no las siento como la primera semana, no quiero arriesgar mucho más.

Leo en las cientos de páginas que se ofrecen en la web, que hay una teoría del vaciado de glucogeno que implica un rodaje muy largo para preparar los músculos para el rellenado. A continuación se sigue una dieta estricta de proteinas primero y de HdC después y con eso las reservas de combustible quedaban completamente cargadas. Supongo que esta teoría ha ido pasando por imitación a los entrenamientos de corredores del monton (llamados populares por los españoles) y que con el tiempo se acepta como un "deber ser" del maratoniano. Acá seguramente cumple otras funciones mas relacionadas con la confianza y la psicologia del corredor que con fenomenos fisiologicos. Veremos que decisión tomo a dos semanas del maratón.

Supongo tambien que ningun corredor aceptaria no tener un fondo largo un mes antes de la maratón.

Proverbio chino:
"Si quieres ser feliz un día, emborráchate. Si quieres ser feliz un año, cásate. Si quieres ser feliz toda tu vida, cultiva un huerto."

lunes, 12 de septiembre de 2011

Lección aprendida.. qué importante es el descanso

Lo sabía, siempre lo supe; siempre me lo dijeron; pero pocas veces lo ponía en práctica. Primera idea que se me viene a la cabeza: Menos kilómetros y más resultados.

Llevo dos meses sumando kilómetros sin importarne los tiempos; cada salida 10k; 4 o 5 veces a la semana. Promedio mensual 100k; sin embargo me suena siempre a poco. Está claro que por un lado me parece poco en relación a las anteriores preparaciones; pero por otro lado, siento que tengo más años; más peso y menos entrenamiento y pienso que esto debe ser el resultado de todo ello.

Correr un maratón con garantías exige una preparación mínima, que siempre estará basada en el kilometraje. Esto no significa que sólo se realicen entrenamientos corriendo. Es necesario realizar muchos ejercicios complementarios que estarán en función de la carga que se realice en kilómetros y de su intensidad y estos ayudan a descargar y a elastizar; sirven para fortalecer los músculos y con ello es posible soportar una mayor carga de trabajo, en forma de kms a diferentes intensidades.

De a poco voy entendiendo que preparar un maratón no sólo es cuestión de entrenar, sino que también se debe descansar suficientemente para asimilar los entrenamientos.

No es fácil entrenarse sólo y bien.

La semana pasada pasé a correr 20k cada día y al tercer día no tenía más ganas de salir; me respeté; estuve dos días sin hacer nada y al tercero había recobrado las energías para volver a salir y qué pasó?, bajé los tiempos en los 20k.


Eso está muy bien, ya siento la capacidad de poder "someter" al cuerpo aun determinado esfuerzo y esto me permite ir desarrollando capacidad para alcanzar mayores desempeños. pero lo más importantes es que voy comprendiendo que descansar es la base para correr más y mejor!

jueves, 8 de septiembre de 2011

Jueves 8 06:30 "hoy no tengo fuerzas.."

Aunque parece lógico que el título haga referencia a que no tengo ganas de escribir este post lo cierto es que tampoco tuve ganas de salir a correr.
Pero tampoco me siento bien, después de no haber corrido..

Es algo habitual supongo. Lo raro sería que una persona corriera todos los días del año, a menos que se trate de Tirtha Kumar Phani ese tipo que ha batido todos los records corriendo sin para día y noche. Creo que todos sentimos de vez en cuando la necesidad de saltarnos algún entrenamiento; mucho más si se entrena solo.

De todas formas, siento que mañana retomaré mis rutinas habituales y en pocas semanas ya estaré corriendo tal como deseo.

Pensaba escribir de esos días en los que un corredor no tiene ganas de entrenarse. Días en los que toca hacerlo y, por la razón que sea, me siento incapaz de salir a trotar. Mi experiencia me dice que, por mucho que cueste, es preferible obligarse a seguir el programa establecido o, si no tenemos un plan definido, lo que habíamos previsto de antemano. Si no lo hacemos, es muy posible que acabemos sintiéndonos culpables y experimentemos algún tipo de remordimiento.. y esto es un poco lo que siento ahora que escribo esto.. tampoco hay que exagerar, pero está claro que dejarse llevar por la pereza o la falta de interés no es el mejor camino para conseguir nada. En cambio, si somos capaces de salir es casi seguro que a los pocos minutos empezaremos a sentirnos perfectamente y nos alegraremos de haber salido a correr. Yo esto lo sé!! pero hoy no pude..

Sin ganas y sin fuerzas
Siempre hay excepciones, por supuesto. Si nuestra falta de ganas obedece a algún tipo de molestia física, lo más sensato es dejarlo para otro día y hoy me dolía un poco la rodilla derecha.. es que en lo que va del mes llevo corrido el 50% de lo que corrí el mes pasado.. hoy pensé que no convenía forzar mi cuerpo y, ante la duda, siempre es mejor descansar que obligarnos a cubrir unos cuantos kilómetros sólo por cumplir lo que habíamos previsto sobre el papel. Tampoco tiene mucho sentido correr sin fuerzas, tan cansados que lo único que deseo es salir de ahí donde estoy!

Recargar los depósitos
Si realmente me siento así, tendré que pensar que estoy comiendo mal, que no estoy aportándole a mi organismo todos los nutrientes que necesita. Los amantes del running necesitamos mucha energía y, en concreto, buenas dosis de carbohidratos. Y es tan importante ingerirlos antes de la carrera (siempre con la medida y la antelación adecuadas en función de la distancia que pensamos recorrer) como al finalizarla, ya que en caso contrario no recargaremos correctamente nuestros depósitos, y es verdad, no estoy comiendo muchos carbohidratos.

martes, 6 de septiembre de 2011

Martes 6; 07:30

Me desperté con la luz del día.. ya no cierro la ventana y me gusta despertarme naturalmente. Pienso algunas veces si salgo a entrenar o no. Tomé mi café y me "obligo" a ponerme los cortos y las zapatillas.
Salgo rumbo a la Reserva Costanera Sur de Buenos Aires de manera tal de estar en la puerta a las 08:00 (antes no abren)

Hoy he salido sin bebida isotónica ni gel con carbohidrato; me preparo para correr 21k mínimo (otra vez)

Rápidamente empiezo a sentir cansancio; experimento lo mismo que en el maratón; en la etapa de transición. (del 24k al 32k aprox.)

Uno puede decir -o yo mismo- que es en este momento, cuando comienza el Maratón: hasta ahora, la euforia de la largada, en primer lugar, y nuestro perfecto estado físico, posteriormente, no nos han permitido captar la verdadera dureza de la prueba; pero, a partir de este momento, una vez que ya comenzamos a sentir el peso de la carrera (las piernas empiezan a sentirse cansadas, ya no da gusto seguir corriendo) y esto me está pasando ahora. Pero tal como cuando entreno para la montaña supongo que estoy en ese punto que se llama agonística. Es cuando vamos a empezar a sufrir física y mentalmente; pero uno debe continuar.

Ya sé que el verdadero sufrimiento psicológico está aún por llegar y será exactamente eol 9 de octubre; en ese momento; un poco como hoy, empezarán a generarse pensamientos que, más tarde, cuando físicamente estemos muy cansados, van a pasearse una y otra vez por nuestra cabeza de manera continuada, provocando, si no estamos preparados, unos efectos devastadores y por eso hoy sigo..

Durante este período de tiempo es cuando uno empieza a preguntarse si va a llegar; es cuando empezamos a fijarnos, no en el camino que llevamos recorrido, sino en el que nos queda por recorrer; es cuando, en definitiva, empezamos a angustiarnos y hasta decaernos, porque ya lo único que queremos es "¡TERMINAR de una buena vez!".

Es, desde mi punto de vista -y desde mi experiencia- el más importante momento, ya que, si durante este momento de tiempo logramos controlar nuestros pensamientos y analizamos objetivamente todo lo que le ocurre a nuestro organismo, posteriormente (cuando las sensaciones físicas sean más desagradables), podré afrontar mi agotamiento en mejores condiciones. Por eso decido seguir aunque a los 14k hubiera querido parar y volverme a casa!.

Ya sé con certeza que durante estos kilómetros, van a empezar a dolerme las piernas, mi ritmo va a ser más cansino, las ganas de correr van a empezar a desaparecer y mi mente ya no va a estar tan despejada.

Ahora es cuando deben empezar a aflorar los pensamientos positivos que he preparado para este momento. En este aspecto hay una cosa clara, si antes del maratón, me ha pasado alguna vez y he podido preveer este cansancio, cuando llegue, voy a afrontarlo con verdaderas garantías, ya que mi cabeza dirá "esto ya me lo esperaba", "es normal este dolor, llevo muchos kilómetros corriendo", "forma parte de la carrera", etc., y no las que normalmente aparecen cuando uno no está preparado ("me duelen las piernas", "no me quedan fuerzas", "estoy muy cansado y todavía me quedan muchos kilómetros", "no voy a llegar", etc.). La diferencia entre unos pensamientos y otros es tal, que, si en este tramo aplicamos los primeros, nuestro sufrimiento final va a ser mucho menor (incluso puede ser inexistente) y se va a limitar, exclusivamente, a nuestro dolor físico (que, por cierto, no es poco).

lunes, 5 de septiembre de 2011

Maratón de Buenos Aires 2011

Será mi quinto maratón.. pero también será el primero. Siempre pienso que es el primero; siempre me sorprendo por cómo reacciona mi cuerpo, mente y alma a los cuarenta y dos, ciento noventa y cinco! El año pasado no corrí y este año comencé "tarde" a prepararme y salvo un problema una semana antes o en medio del maratón sé que lo único que me interesa es llegar.

Llevo apenas 5 semanas entrenando con el doble objetivo del maratón y de bajar de un poco de peso para sentirme mejor en la carrera. Como estoy en un periodo en que lo que busco es aguantar y aumentar la distancia que recorro, por ahora los tiempos no me preocupan tanto; aunque pienso que estoy más lento que hace dos años atrás.

Trato de tomármelo con calma e intentar aumentar poco a poco la distancia que recorro. Comencé hace cinco semanas con 10k por día, cuatro veces a la semana y hoy corro 20k cuatro veces por semana. Trato de hacer lo que Murakami hace para escribir o para correr: "continuar es no romper el ritmo". Dicen que para los proyectos a largo plazo, eso es lo más importante. Una vez que logras ajustar tu ritmo, lo demás viene solo. Lo que sucede es que, hasta que la inercia hace su trabajo; todo el interés que se ponga en continuar nunca es suficiente.

Esta mañana he corrido un poco, solamente para aflojar el cuerpo. De a poco se está asomando el sol de la primavera en Buenos Aires.

martes, 22 de marzo de 2011

Lullaillaco IV (noviembre 2010)

Me despierto después de una larga noche, con poco descanso (como siempre) Saturo 84 y mi FCM está en 110, pero no me hago problemas porque acabo de llegar de una “caminata” descontracturante hasta lo 5100.. mientras tanto Lorenzo va y viene al CI (5500).. hoy ya fue dos veces!

Todavía pienso en la ceremonia de ayer, donde ofrendamos a la montaña, de acuerdo al rito de Lorenzo. “Tata Inti, Pachamama, Apus Huayra, Apus Llulla”, oración de agradecimiento y pedido de protección.

El hecho de medirnos todo el tiempo la saturación de oxígeno y la frecuencia cardiaca es que entre nosotros hay un médico que recaba datos para un estudio sobre el comportamiento del cuerpo en la altura.
Muchas charlas, mucha discusión, me hago muchas preguntas.., otra vez estoy pensando mucho.
Almuerzo arroz con verduras.., duermo una siesta de una hora.
Las horas en el campo base son largas y tediosas.. son días de aclimatación. Seguimos alimentándonos con abundancia, Insistimos con la hidratación.

Lorenzo nos cuenta que en campo 1 hay una vertiente aparecida luego del terremoto del año pasado. Esto es una gran noticia ya que alivia la necesidad de portear agua a los campamentos superiores. Proponemos llamar a campo 1 “Río Lorenzo”.
Mate y preparativos para mañana, porque saldremos al CI (5500)
El cerro se ve imponente.. se ve muy alto.., pienso en los Incas que lo eligieron (y lo subieron) como santuario de altura, ahí ofrendaron a los tres chicos.. y ellos también lo subieron.

07:30 me despierto/08:15 desayuno, armo la mochila y salimos (10:15)
Dos horas después a los 5100/5200 metros sobre el nivel del mar, nos desviamos a la derecha y vemos desde la altura unas “ruinas incas”.. un campamento base seguramente desde donde planificaron el ascenso hace 500 años atrás, de sólo pensar lo que tenían y a dónde llegaron, les doy tomo mi respeto.


Acá estoy solo, tratando de pensar en la vida, en mis afectos, en un territorio de hostilidad individualista que me envuelve en una soledad tan conmovedora y humana como la amistad que se necesita por estos lugares.

De a ratos reflexiono sobre la caída de los ideales y los que han venido a sustituirlos, todo en la forma de la geografía y compañías que he venido transitando por estos pueblos desolados, vías de FFCC como vestigios y personas en viaje buscando tal vez su destino. De a ratos a la realidad de seguir subiendo esta montaña increíble.

En poco menos de 4 horas estamos en el CI; hidratamos y comemos unos fideos. Algunos ya no “cenan”.
Mi compañero de carpa se siente mal; en palabras del médico comenzó empeorar su nivel de oxigenación. En un rato más tarde desarrollaría un edema de pulmón de la altura. Cuadro potencialmente grave. A la noche tengo que cambiar de carpa para que el médico se instale en nuestra carpa y comencé a medicarlo. Le proporciona dosis mayores de diamox (acetazolamida), nifedipina y dexametasona. Con cierta lentitud, los parámetros se estabilizaron en la madrugada. La mañana lo encontró en mejores condiciones y bajó al campamento base.

Lullaillaco III (noviembre 2010)

Salimos hacia el base del Llullaillaco; para esto hay que cruzar el salar de Arizaro, el tercer salar más grande del mundo enmarcado por montañas que superan los 6000mts de altura. (nuevamente podemos ver el Aracar, el Salim, el Llullaillaco y el Socompa); de a poquito ascendemos hacia la vieja estación de ferrocarril de Caipe y aprovechamos las vistas panorámicas del salar, principalmente lo que se llama la herradura y un poco más lejos el Cono de Arita.


Me tomo un rato y en silencio pienso en el significado de esta estación de ferrocarril.., tan alejada de los centros urbanos, tan alejada de nuestras ciudades en la pampa húmeda. Pienso en la historia de los ferrocarriles argentinos; íntimamente ligada al desarrollo de la Argentina; palanca del desarrollo y poblamiento del territorio del país. Camino por dentro de la estación abandonada, llena de libros de tráfico; conservados en buen estado (tal vez por el intenso frío); no puedo sacarme de la cabeza lo que significó la privatización; pienso en el visto bueno de gran parte de la sociedad que creía que las empresas del Estado eran deficitarias y había que privatizarlas, más la complicidad de muchos.. pienso en la privatización y la consecuencia más terrible.., la desaparición de pueblos como Caipe; que se convirtieron virtualmente en “fantasmas”, además de quedarse incomunicados y de perderse los trenes aguateros, que llevaban agua a todo el interior del país donde escaseaba este producto. Pienso en los cientos de miles de personas mudándose a las grandes ciudades. Pienso en los servicios más elementales que desaparecieron junto con el tren, como el sanitario, que llevaba medicamentos y médicos que realizaban campañas de vacunación por cientos de pueblitos. Pienso mucho.., y esto no es bueno cuando se está solo.

Algunas horas después llegamos al CB (5000 metros sobre el nivel del mar); saturo 89 y mi FCM está en 104.. ya no es lo mismo para el cuerpo.

Armamos las carpas, cenamos fideos con salsa y nos metemos en las carpas. Hay ráfagas de viento de 60 a 70 km./h. El lugareño -Lorenzo Martínez- portea al CI (5500) y a dormir.. y a despertarse cada dos o tres horas (sin dolor de cabeza y eso es la acetatozolamida..) sueño con Aleja.

Cago de urgencia a las 23:00 y a las 3 de la madrugada con -15° tengo que volver a salir de la carpa a mear, esta vez apago la frontal y veo (y disfruto unos segundos) la luna llena, el cielo estrellado y sin viento.

Lullaillaco II (noviembre 2010)

Un día más tarde salimos de SA de los cobres a las 09:00 de la mañana y llegamos a Tolar Grande a las 13:30; recorrimos una fantástica geografía.., llena de colores, atravesamos el Abra del Gallo; el campamento minero de Olacapato y un pequeño pueblito que se llama Pocitos, dentro mismo del salr de Pocitos. Más tarde nos metemos en el rojizo desierto conocido como el Desierto del Diablo y desde ahí ya tenemos la primera imagen real del Llullaillaco. Ya estamos a 3505 metros sobre el nivel del mar y la presión barométrica es de 664. Nos ubicamos en el Refugio Franco Argentino y nos tiramos a formir un poco..Saturo 91 y nuevamente 68 de FCM.

Hoy recibo un mensaje de Aleja, (grabado en el buzón de voz) me da aliento, confianza y me pide que disfrute.

En el almuerzo nos cruzamos con cuatro montañeros que dicen no haber podido pasar el CII (6000) nevó toda la noche y había demasiado viento.

Llevamos dos días comiendo, durmiendo y apenas nos movemos por los alrededores de Tolar Grande.

Por suerte hoy salimos.., fuimos a la cueva del hombre muerto, un túnel natural debajo de una montaña de sal de 120 metros.., donde hay que reptar todo el tiempo porque no hay lugar para pasar agachado y mucho menos parado. Puedo experimentar en poco metros algo de lo que deben haber sentido los mineros chilenos al estar dos meses bajo tierra y sin luz solar. Esta cueva es una interesante ormación de estalactitas y estalagmias formadas por las filtraciones de agua que las han formado durante centenios.


De regreso pasamos por una suerte de mirador natural (elevación en medio de la puna de 300 metros) desde donde se puede ver el Vn. Socompa, el Llullai, el Aracar y otros gigantes de la puna; y terminamos el día yendo al ojo de mar, un agujero de más de 30 metros en pleno salar de Arizaro.

Lullaillaco (noviembre 2010)

Es la segunda vez que me invitan a este cerro.. cerro que para mi tiene muchas connotaciones, es alto; tiene historia, tuvo y tiene santuarios de altura, los niños del Llullaillaco, y una de las montañas que mi sobrino Marcos siempre se acuerda ya que recibió como regalo de mi parte una foto enmarcada de la montaña hace algunos años; en fin se ha convertido en una montaña familiar..
Esta vez decido decir que si.., invito a mi amigo de montaña pero me dice que no. Así que una vez más deberé integrarme a un grupo.






La preparación es lenta pero metódica; internet por suerte me permite leer desde relatos de morfología climática y morfogénesis del volcán hasta relatos de ascensiones. El Llullai como le dicen algunos es mundialmente conocido por tratarse de uno de los volcanes más altos del planeta y obviamente por haber sido el escenario de unos de los descubrimientos más importantes de la arqueología americana, y que como consecuencia, se crea en Salta el Museo de Arqueología de Alta Montaña, que tantas veces he visitado.

Ómnibus.. casi 22 horas a Salta (para no pagar exceso de equipaje en el avión); tengo que trabajar durante dos días en nuestra oficina local y a empezar a soñar con el cerro.

Nos juntamos a cenar empanadas y a conocernos, bah a conocerlos yo.., porque entre ellos se conocen.. corren docenas y docenas de empanadas regadas de cerveza, anécdotas que solo escucho atentamente y para quitarme (ya!!) algunos prejuicios trato de ubicarme en la montaña.

San Antonio de los Cobres, 3750 metros sobre el nivel del mar, apenas 647 milibares de presión (habitualmente vivo en Buenos Aires con 1015 o 1020 y a 100 metros como mucho sobre el nivel del mar, situación a la que me veo “obligado” a adaptarme una o dos veces al año); Saturo 87 y mi FCM es de 68. Por suerte no siento dolor de cabeza. Almuerzo y ceno bien; sigo tomando mucho agua y mucho mate.

En el hospedaje que dormimos hay una nena de 9 años, muy silenciosa; Lorena se llama y me dice que le gusta mi campera de duvet, su madre me dice que le vendría bien tener una de estas en el invierno.. porque cuando va a la escuela está muy frío.. (a Gustavo –un compañero de expedición- le da una carta con los pedidos y le pone la dirección de una casilla postal en el correo argentino de San Antonio de los Cobres)

Extraño a Aleja, no me llegan mensajes y supongo que es para “protegerme”; para que no la extrañe más. Pienso también en la montaña de Marcos, y espero traerle fotos de la cumbre.

miércoles, 12 de enero de 2011

Momentos en 2010

Regresé de Aconcagua con el agridulce sabor en la boca de saber que podría haber sido pero no puede lograrlo. Durante muchos meses me sigue acompañando esta sensación y la única forma que tengo es volver algún día.

Cuando subo a la cumbre (o cuando no lo hago), la diferencia esencial es mínima e íntima como decía Iñaki, y todo lo que uno sienta o aprenda nunca va a depender de esos últimos (pocos a veces) pasos. Aunque es cierto que escalamos para llegar a la cima, si el viaje sólo dependiera de esa circunstancia sería un ser frustrado; y yo siguo coleccionando pre-cumbres. No me importa, cada vez que regreso a casa siento que he disfrutado también el viaje

La única manera de conocer los límites de lo posible en uno es aventurarse un poco más allá de ellos, hacia lo que a veces parece imposible. Actuar sin temores o quedarme paralizado dejando pasar de largo "valiosas" oportunidades. Valoro mis cualidades, mis logros y capacidades, y fomento cualidades positivas. Analizo mis límites, intento superarlos o aceptarlos si no es posible. De esto se tratan mis historias.

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